El caso se refiere a un
hombre llamado Amaury Rivera, quien afirmó que fue secuestrado por
extraterrestres en su camino de casa al trabajo en 1988, y habría hecho una
imagen de la nave espacial habría secuestrado, ya que el objeto se enfrentaba a
una persecución de tres aviones estadounidenses.
Durante mucho tiempo,
entusiastas de los ovnis estaban convencidos de que la historia de Rivera era
algún tipo de verdad. Sin embargo, se convirtió en una farsa cuando un artista
alemán llamado Gutiérrez admitió que había ayudado a Rivera para crear las
imágenes.
A pesar del supuesto
fraude, el caso fue presentado entre los ufólogos México, Alemania, Hungría,
Japón, Argentina y Taiwán, fue una revelación que la NASA había confirmado la
autenticidad de las fotografías Rivera. Sin embargo, el analista que trabajó en
ellos ya no estaba empleado por la agencia espacial en el momento del análisis.
Las imágenes muestran un
F-14 "Tomcat" Marina de los EE.UU. tratando de interceptar un objeto
grande en forma de disco. aún más el análisis científico de las fotografías
concluyó que ambos objetos eran entre 3 y 5 km de la cámara y el avión se movía
con rapidez, mientras que el disco se movía de forma relativamente lenta o se
detiene de forma.
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